
- Los reglamentos de diseño ecológico y etiquetado energético podrían propiciarles el ahorro de 20.000 M€ hasta 2030
- Se espera que las puntuaciones fortalezcan la competitividad de la UE sobre la base de la sostenibilidad, un sector de reparaciones floreciente y la creación de empleos locales
Cerceda, a 23 de junio de 2025.- Los consumidores podrán tener más información sobre la mayor o menor facilidad para reparar sus teléfonos inteligentes y tabletas. La CE ha introducido un nuevo sistema de puntuación de reparabilidad, que figurará en la nueva etiqueta energética que acompaña a estos productos electrónicos, a fin de que los ciudadanos tomen decisiones más sostenibles.
Las puntuaciones de reparabilidad proporcionan una calificación clara y fácil de entender: desde la A (la más alta) hasta la E (la más baja) y se basan en un método científico riguroso desarrollado por el JRC, que tiene en cuenta los componentes clave del producto ('piezas prioritarias') y varios factores que influyen en la reparabilidad ('parámetros'), como son los pasos necesarios para el desmontaje, las herramientas necesarias con las que acceder a los componentes para su sustitución o el grado de disponibilidad de piezas de repuesto e información de reparación. La evaluación de todos estos parámetros da como resultado la puntuación de reparabilidad agregada que se mostrará en las etiquetas energéticas de la UE.
Al aumentar la vida útil promedio de los teléfonos inteligentes y tabletas, los consumidores, no solo ahorran dinero, sino que también contribuyen a reducir el impacto ambiental de la producción y los residuos electrónicos. De hecho, y según el Informe General de Contabilidad del Impacto del Ecodiseño de 2024, el Reglamento de Ecodiseño y el Reglamento de Etiquetado Energético, que incluyen la puntuación de reparabilidad, podrían ahorrar 0,2 millones de toneladas de CO2 equivalente al año y 20.000 millones de euros para 2030.
Además, se espera que la puntuación estimule la demanda de productos más reparables, lo que conducirá a un fortalecimiento de la competitividad sobre la base de la sostenibilidad, un sector de reparaciones floreciente y la creación de empleos locales.
A medida que la UE sigue impulsando una economía más circular en consonancia con el Clean Industrial Deal, la Comisión ha anunciado planes para considerar más requisitos de reparabilidad en el marco del Reglamento de Diseño Ecológico para Productos (ESPR), incluyendo otros productos electrónicos de consumo y pequeños electrodomésticos.
Fuente e imagen: Comisión Europea