EN TRÁNSITO HACIA LA ECONOMÍA CIRCULAR
El 11 de octubre de 2017 se abría una nueva etapa en la historia del complejo medioambiental de Sogama en Cerceda. En un acto presidido por la conselleira de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio, Beatriz Mato, la empresa gallega Valtalia, adjudicataria de los trabajos de ampliación de esta infraestructura, en estrecha coordinación con el equipo técnico de Sogama, ponía la maquinaria a funcionar para dar forma a un innovador y vanguardista proyecto de ingeniería, que hoy ya se ha convertido en realidad gracias al empeño y buen hacer de muchas personas, y a la confianza depositada por muchas otras.
A pesar de las inclemencias meteorológicas de los primeros meses de este año, la obra fue concluida en plazo, respondiendo de forma óptima a los requisitos contemplados en el contrato. Tras este primer eslabón, yas nos encontramos inmersos en un período de pruebas, que abarcará unas 14 semanas, durante el cual se verificará el correcto funcionamiento de los equipos que conforman esta instalación, así como la efectividad de una tecnología puntera con una función concreta: recuperar y poner en valor.
Más de una treintena de lectores ópticos combinados con otros sistemas de selección automáticos garantizarán que los envases contenidos en la basura convencional entren en el circuito del reciclaje y cobren una nueva vida en la industria transformadora. Se evita de esta forma el consumo de materias primas vírgenes y preservando los ya escasos recursos naturales.
Pero más allá del reciclaje, esta nueva planta, que se encontrará a pleno rendimiento a finales de este año, y cuya operativa se complementará con la remodelación de la actual nave de reciclaje, tratamiento y elaboración de combustible, contribuirá en buena medida a reducir el vertido, en plena sintonía con las directrices europeas en la materia. Y como muestra, el posicionamiento del Consejo Europeo, que aboga por reforzar la gestión jerarquizada de los residuos (prevenir, reducir, preparar para reutilizar, reciclar y valorizar energéticamente la fracción no reciclable) y minimizar el uso del vertedero, limitándolo al 10% en el año 2035. Un porcentaje que Sogama alcanzará en breve, haciendo posible que Galicia, en contraposición con ese 57% de vertido que como media asola a España, pueda liderar el ránking de comunidades que menos desechos vierten.
Sogama se creó en 1992 con una función clara: eliminar los vertederos municipales y puntos de vertido ilegal que ponían en riesgo la salud ambiental de nuestra tierra. Tras posibilitar su clausura así como la regeneración del espacio degradado ha contraído nuevos votos: llegar al vertido técnico cero, es decir, que sólo se lleve a vertedero la fracción de residuos que no se pueda reciclar ni valorizar material o energéticamente. Culminada la ampliación del complejo este propósito, que para otros modelos resulta inviable debido a su configuración, será perfectamente constatable en Sogama.
Respondemos con hechos a nuestros compromisos, y lo hacemos desde la máxima transparencia y con las mayores garantías. Nos mueve dispensar el mejor servicio público y velar por el bienestar de los gallegos a través del cuidado del medio ambiente. Y sabemos que esto sólo es alcanzable si trabajamos bajo el paraguas de la sostenibilidad. Recuperar más y verter menos hará posible nuestro tránsito hacia la economía circular.
Presidente
Javier Domínguez Lino
