
- Pertenecían al Ciclo Superior de Laboratorio Clínico-Biomédico y al Ciclo Superior de Química y Salud Ambiental
- En el transcurso de su visita al Complejo Medioambiental de Cerceda, técnicos de la entidad explicaron al grupo el despliegue técnico y la adopción de tecnologías de última generación que permiten a la empresa llevar a cabo una vigilancia exhaustiva de sus emisiones e inmisiones, vertidos, depuración de aguas, etc
- Mediciones periódicas y en continuo corroboran que todos los parámetros están muy por debajo de los límites legales
Cerceda, a 7 de abril de 2025.- Más de medio centenar de estudiantes del CIFP Ánxel Casal de A Coruña que cursan el Ciclo Superior de Laboratorio Clínico-Biomédico y el Ciclo Superior de Química y Salud Ambiental, se informaron, en el transcurso de una visita realizada al Complejo industrial de Sogama en Cerceda, sobre los protocolos de control ambiental desplegados por esta empresa pública para garantizar la compatibilidad de su labor con la protección del entorno y la salud pública.
Para ello, monitores especializados explicaron al grupo la operativa de esta infraestructura, así como el despliegue técnico y la adopción de tecnologías de última generación que permiten a la compañía llevar a cabo una vigilancia exhaustiva de sus emisiones e inmisiones, vertidos, depuración de aguas, etc, además de adoptar todas las medidas preventivas y correctivas necesarias para evitar y minimizar incidencias. Los resultados de las mediciones periódicas y en continuo corroboran que todos los parámetros están muy por debajo de los límites legales.
En este sentido, se incidió en que las plantas de valorización energética son las instalaciones más controladas desde la dimensión ambiental y de la salud, pesando sobre las mismas una rigurosa legislación, que resulta mucho más exigente que la que rige para otro tipo de infraestructuras. De hecho, en la Unión Europea funcionan más de 500 plantas de esta tipología, situándose en la mayor parte de los casos en el centro de pueblos y ciudades, circunstancia que propicia el suministro de calor para las calefacciones y agua sanitaria de las comunidades vecinales.
En Copenhague, además, la planta se utiliza como parque de ocio y recreo, toda vez que cuenta con una pista de esquí para disfrute vecinal y una pared acondicionada para la práctica deportiva de escalada.
Para conocer con más precisión los detalles de la operativa de Sogama, los integrantes del grupo realizaron una visita virtual por las distintas instalaciones que conforman el Complejo cercedense, pudiendo ver el circuito de tratamiento aplicado a los residuos desde que entran en esta infraestructura hasta que se convierten en recursos, bien mediante su envío a los centros recicladores, o bien mediante su transformación en energía eléctrica, en el caso de la parte no reciclable.
Saludos, Departamento de Comunicación