
- Mientras que, en 2017, se pusieron en el mercado 241 bolsas por habitante, en 2023 fueron 142, un 40% menos
- Con estos datos, se puede decir que se están cumpliendo los objetivos del Real Decreto 293/2018, que pretendía reducir el consumo de bolsas plásticas, apostar por la reutilización y por el uso de materiales compostables, y definía las características que debían cumplir las bolsas que se pusieran en el mercado desde entonces
- Teniendo en cuenta la norma, no deberían entregarse en ningún establecimiento bolsas de plástico tradicional con espesor inferior a 50 micras.
Cerceda, a 28 de julio de 2025.- Desde la aprobación del Real Decreto 293/2018, de 18 de mayo, sobre la reducción del consumo de bolsas de plástico y por el que se crea el Registro de Productores, la cantidad de bolsas plásticas que se ponen en el mercado cada año en España ha descendido un 40%.
Mientras que, en ese año, el mercado español consumió 11.238 millones de bolsas de plástico, en 2023, último ejercicio del que hay datos disponibles, la cifra se reduce a 6.890 millones. Y, atendiendo al consumo por habitante, en 2017 se pusieron en el mercado 241 bolsas por habitante, mientras que en 2023 fueron 142, un 40% menos.
Con estas cifras, se puede decir que se están cumpliendo los objetivos del Real Decreto, que también apostaba por la reutilización y por el uso de materiales compostables, definiendo las características que debían cumplir las bolsas que se pusieran en el mercado desde entonces:
- Bolsas de plástico con espesor igual o superior a 50 micras y un contenido de al menos el 50% de material reciclado. Diseñadas para ser reutilizables, se desechan en el contenedor amarillo al final de su vida útil y pueden fabricarse conforme a la Norma UNE 53930-1 y 2. Se utilizan en las líneas de caja de los supermercados y en el comercio en general, y se suele cobrar por ellas, siendo obligatorio si tienen más del 70% de plástico reciclado.
- Bolsas ligeras (de entre 15 y 49 micras) y muy ligeras (de menos de 15 micras) fabricadas en material compostable según la Norma Europea UNE-EN 13432. Son de un solo uso y se utilizan principalmente en la sección de frutas y verduras de los supermercados. Al final de su vida útil se desechan en el contenedor orgánico para ser compostadas. Las de menos de 15 micras no están sujetas a obligación de cobro, las de 15 a 49 micras, sí.
Teniendo en cuenta la norma, no deberían entregarse en ningún establecimiento bolsas de plástico tradicional con espesor inferior a 50 micras. Si hay establecimientos que lo hacen, están incumpliendo la legislación vigente, comprando bolsas a proveedores fraudulentos.
Consumo de bolsas por material
Si se desglosan los datos en función de las materias primas que se utilizan, se comprueba que la producción de bolsas de plástico tradicional −fabricadas con polietileno y que desde el Real Decreto deben incluir al menos el 50% de material reciclado− ha caído desde los 11.198 millones hasta los 3.677, es decir, de 240 bolsas por habitante a 76.
Las de material compostable han seguido la tendencia opuesta. Su uso ha crecido, pasando de ser residuales en 2017 (cuando se fabricaron 40 millones, 0,86 bolsas por habitante) a consumirse 3.200 millones en 2023, es decir, 66 bolsas por habitante.
Con la obligación de utilizar material reciclado en la fabricación de bolsas de plástico con espesor igual o superior a 50 micras, la industria ha aumentado mucho su consumo (194.000 toneladas desde 2017 hasta 2023), evitando la emisión de más de 300.000 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Concienciación ciudadana y adaptación de la industria
Conseguir estas cifras demuestra, no solo el aumento de la concienciación ciudadana en favor de la sostenibilidad, sino también el trabajo de la industria para adaptarse a estas novedades en tiempo récord.
Para cumplir con el Real Decreto, el sector ha tenido que hacer grandes inversiones y un esfuerzo muy importante en áreas como la innovación, el desarrollo de materias primas, el diseño de producto, la normalización y la certificación.
Fuente: ANAIP
Imagen: Freepik