Como cada verano, y coincidiendo con las vacaciones estivales de muchas familias, Sogama y la Consellería de Medio Ambiente recuerdan a los ciudadanos responsables la necesidad de no relajar ni abandonar los buenos hábitos en la protección del medio ambiente y, a los menos concienciados, de que estas fechas de mayor tranquilidad pueden ser un buen momento para el cambio y el compromiso con un entorno más limpio y saludable.

Sencillos gestos con grandes recompensas:

• Reduce la producción de desechos. Esta es una premisa básica para la correcta gestión de los mismos. Lleva siempre tu propia bolsa reutilizable, tu botella de agua rellenable, evita el consumo de productos de usar y tirar, y prescinde de los envases y envoltorios innecesarios.

• Combate el desperdicio alimentario. Calcula el menú en función del número de comensales y compra alimentos feos (tienen las mismas propiedades nutritivas que los guapos). Si vas a un restaurante o al chiringuito de playa, pide únicamente lo que vayas a comer. De haber sobras, aprovéchalas.

• Nada al suelo. Si no tienes una papelera cerca o el contenedor adecuado, guarda el residuo hasta que encuentres el lugar correcto en el que depositarlo para su correcta gestión.

• Cada residuo a su contenedor. Solo separando los desechos en origen por tipologías e introduciéndolos en el contenedor al que corresponden, podrás propiciar el reciclaje y sus beneficios (ahorro en el consumo de energía y de materias primas vírgenes)

• Estés donde estés, prioriza el consumo de productos locales y de temporada. Contribuirás a aminorar las emisiones de CO2 derivadas del transporte y favorecerás la economía local.

• Elige alojamientos con certificación ambiental y sigue sus recomendaciones.

• Haz un uso eficiente del agua- Duchas cortas y cierra el grifo mientras te cepillas los dientes o te enjabonas las manos.

• Ahorra energía. Aprovecha la luz natural, que en verano dura mucho tiempo, y desenchufa los aparatos eléctricos cuando no los estés utilizando. Cautela con el aire acondicionado.

• Desplázate de forma sostenible, caminando, en bicicleta o en transporte público. De tener que viajar en coche particular, opta por compartirlo.

• Desconecta para reconectar. Intenta prescindir de las pantallas. Disfruta de la playa, el campo, la montaña, los ríos, las ciudades, los pueblos, las aldeas, pero cuida todo lo que te rodea.